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¿Cómo funcionan los frenos de disco?
Los frenos de disco son un tipo de sistema de detención que se utiliza en vehículos que constan de una pinza y un rotor. Cuando el conductor pisa el pedal del freno, la pinza aprieta las pastillas de freno contra el rotor, lo que produce una reducción de velocidad del vehículo o lo detiene.
El rotor es un disco de metal grande que gira a la vez que la rueda del vehículo y está montado en su eje. La pinza es un dispositivo que contiene una o más pastillas de freno, que son bloques de un material resistente al calor que se aprietan contra el rotor y que provoca la detención del vehículo.
Al pisar el freno por parte del conductor, se activa un sistema hidráulico que aplica presión en los pistones de la pinza. Los pistones empujan las pastillas de freno contra el rotor, generando así una fuerza de fricción que detiene la rueda. Las pastillas de freno y el rotor están diseñados para resistir altas temperaturas y fricción, y también para disipar el calor generado que se produce en el proceso de frenado. Para lograr el buen funcionamiento de este proceso es imprescindible usar materiales de alta calidad en la fabricación de las pastillas y el rotor, siendo imprescindible la introducción de canales de refrigeración y ranuras para la ventilación. Los frenos de disco tienen un uso casi hegemónico en los vehículos debido a su capacidad para proporcionar un excelente frenado incluso en situaciones de emergencia, siendo también menos propensos a la pérdida de rendimiento debido a la acumulación de polvo o humedad, teniendo por lo general menos mantenimiento que los frenos de tambor.